intonorumori

Thursday, July 20, 2006

Si tan solo un día de estos encontrara la diferencia entre el sueño y la realidad...

Suena raro, yo lo se, pero es cierto, el límite que define lo real y lo imaginario vaga sin descanso entre estos dos campos de la percepción, es un límite modificable en muchos aspectos dependiendo del tiempo, del espacio y de nuestras consideraciones. Lo que para nosotros era un simple sueño ayer, hoy es completamente real, y mañana tal vez se pierda en la vaguedad del recuerdo. Todo lo que soñamos, pensamos y vivimos se puede resumir en impulsos eléctricos que viajan a través de nuestras neuronas y que conforman nuestro impresionante y complejo sistema de vida.

Nuestros sentidos captan todo lo que nos rodea, miles y miles de elementos como los olores, los colores, las formas, las texturas y los sonidos se van almacenando en nuestro cerebro, quien selecciona algunos de estos elementos para construir una realidad comprensible en un instante y deja otros elementos almacenados en el subconciente, elementos que posteriormente serán usados en nuestros sueños para combinarse y crear toda la interface entre nosotros y el mundo "irreal" de nuestro reposo.

Sin embargo, al llevar todo al plano de lo perceptivo, encontramos que al final toda la información es almacenada e interpretada por nuestro cerebro en procesos muy similares, tanto lo que sentimos como real como lo que imaginamos, digamos que todo funciona en un lenguaje compatible para que nuestro cerebro lo pueda comprender.

Todos creemos poseer la habilidad de reconocer y diferenciar en nuestra mente aquello que es o que fue real y aquello que es o fue producto de nuestra imaginación, pero al comprender que al final del proceso de recopilación todo es llevado al mismo plano intangible, podríamos preguntarnos si nuestra habilidad es en realidad a prueba de errores.

Podemos vivir en un sueño constante y no ser consientes de ello, de hecho creo que no hay realidad mas falsa que la que percibimos a través de los sentidos. Puede ser el único escape que tenemos de esa realidad "irreal" el mundo que cada uno percibe y que se materializa ante nosotros en el plano de las ideas.

Thursday, July 13, 2006

Y Dios dijo... Hágase la luz...

Discutiendo en una madrugada como esta, con una amiga como pocas... llegue a una coclusión a la que no llegaba desde que estaba en el colegio (el medio represivo en el cual me encontraba en esa distante época escolar hacia trabajar a mi cerebro de una manera increible, nunca creí llegar a decirlo pero extraño esos días de represión); Esta conlusión a la que llegue se puede resumir en la siguiente pregunta:

Y quien diablos nos hizo creer que nosotros la raza humana somos superiores?

Génesis 1:28 "Y los bendijo Dios; y díjoles Dios: Fructificad y multiplicad, y henchid la tierra, y sojuzgadla, y señoread en los peces de la mar, y en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra."

Pues claro, somos llamados por el mismisimo Dios a sentirnos dueños de todo lo que nos rodea, a sentirnos señores de todos los animales, a dominar la tierra, a llenarla completamente, dejó a nuestro criterio toda su creación.

Grave error, pues una y mil veces hemos demostrado nuestra incapacidad para gobernar justamente, cuando estamos en la cima desaparece completamente el resto de la montaña, tendemos a pensar que todo aquello que reposa debajo de nosotros no tiene mas función que la de un calido y confortable tapete, que evita que nuestros lindos y hermosos piecesitos se rasguen con la aspereza de la realidad.

Es entonces cuando nos conviene creer que somos únicos y exclusivos poseedores de la verdad, fuimos la raza escogida por Dios para alzar el estandarte de la razón y asi iluminar a todos los seres que, aunque nos duela aceptarlo, coexisten con nosotros.

Pero bueno, la realidad es otra, basta con observar el comportamiento de cualquier otra forma de vida para darnos cuenta de nuestra terrible ignorancia "señorial", encontrando que hay inteligencia en otras especies, comportamientos sociales organizados, sentimientos, reacciones, como en nuestra temible y superior raza humana, tal vez debieramos dedicarnos a observar a nuestros subditos para comprender un poquito mejor el tejido de la vida, y para tomar algunas clasecitas de humildad.